Nutrición Ortomolecular:
Todos los seres vivos, por muy similares que sean (por ejemplo, dos pastores alemanes), tienen distintas necesidades nutricionales, ya que el lugar donde viven y sus costumbres son distintas (uno vive en una casa, hace poco ejercicio y el otro en una finca, al aire libre), además, los procesos patológicos, los distintos estados fisiológicos (perrita embarazada, o lactante) y la edad (cachorro, adulto, geriátrico) hacen que aumente la necesidad de determinados nutrientes. Por ejemplo, en un animal muy mayor habrá muchas reacciones oxidativas que produzcan radicales libres, por lo tanto, necesitará más antioxidantes y vitaminas que un adulto sano.
Es decir, se trata de trabajar a nivel de las células que componen el organismo y de aportar a estas células las vitaminas, minerales, ácidos grasos... necesarios para mantener su funcionamiento óptimo cuando el animal está sano o para restaurar sus funciones cuando el animal está enfermo. Así recuperaremos el estado de salud, a través de este aporte.
La diferencia fundamental entre esta terapia y la terapia farmacológica es que los nutrientes pertenecen al metabolismo celular, así pues la célula los reconoce como propios y los usa fácilmente, y lo favorecen favoreciendose el metabolismo celular allí donde es necesario (es el propio organismo el que se cura a sí mismo).Sin embargo, Los fármacos, al ser sintéticos, son ajenos al metabolismo celular y “obligan“ a la célula a usarlos dentro de su metabolismo, tenga las consecuencias que tenga (por lo tanto, pueden aparecer efectos secundarios). No es lo mismo tratar la alergia con fármacos como los córticos (que no eliminan la causa del problema), que con tratamientos más suaves pero igual de efectivos como la nutrición ortomolecular (que además muchas veces se ocupará de erradicar la causa del problema). Tampoco es lo mismo tratar el dolor articular de animales geriátricos con AINEs (que pueden provocarles problemas a largo plazo), que proporcionarles las materias primeras necesarias (nutrientes) para que disminuya su dolor y “reconstituyan” sus cartílagos.
Como en el caso de la medicina china se trata de recuperar el equilibrio "desde dentro" y no sólo de paliar los síntomas, por eso podemos tardar un poco más de tiempo en ver resultados que cuando utilizamos los fármacos, pero al no provocar efectos secundarios se mejora el estado general de salud del animal y es el organismo el que se sana a sí mismo. De la misma manera, existen casos que al administrar este tipo de terapia el animal mejora rápidamente comparado con otras terapias, pues le estaremos administrando justo lo que necesita pero sin ningún impedimento no natural para su organismo.
La nutrición ortomolecular es una gran compañera de terapias que “desatascan nudos” en el paciente, como la acupuntura y la homeopatía: en estos casos la terapia ortomolecular aportará al animal “material” que necesitará su cuerpo para seguir el mecanismo que desencadena el tratamiento con medicina china.
Fdo: Esperanza Álvarez Gómez. Colegia num. 4879 en Madrid
http://www.acupunturaenanimales.es
